Cuando pensamos en aire acondicionado lo primero que nos viene a la cabeza es ese aparato que nos permite sobrevivir a las altas temperaturas del verano. Pero lo cierto es que cuando llega el invierno y los grados caen, el aire acondicionado también puede ser de gran ayuda.
Esto es posible gracias a los equipos con calefacción integrada. Te contamos cómo funciona el aire acondicionado y la calefacción para conseguir una temperatura agradable en el hogar en cualquier época del año.
¿Cómo funciona la calefacción con aire acondicionado?
Un aire acondicionado con calefacción es un equipo que, además de ofrecer refrigeración, puede invertir su ciclo de funcionamiento para generar calor. Esto se logra a través de un proceso llamado “ciclo inverso”, que permite extraer el calor del exterior, incluso en invierno, y transferirlo al interior de la estancia.
Los aparatos de aire acondicionado son bombas de calor. Éstas transfieren la energía que cogen del aire de la calle si es frío en calor y si es aire caliente en frío. Es decir, convierten la energía del aire del entorno de una manera eficiente.
Estos equipos son especialmente efectivos en climas templados, donde no necesitas una calefacción extrema durante el invierno. De hecho, los sistemas de bomba de calor como es el aire acondicionado pueden funcionar de manera muy eficiente incluso con temperaturas exteriores frías, siempre y cuando no sean extremadamente bajas. Optar por un sistema de aire acondicionado con calefacción te permite tener un buen control sobre la temperatura de tu hogar, sin gastar de más.
Ventajas del aire acondicionado con calefacción
- Versatilidad: al ser un sistema dos en uno, te permite tener control sobre la temperatura de tu hogar tanto en invierno como en verano, todo con un solo equipo.
- Gran eficiencia energética: estos equipos son mucho más eficientes energéticamente que los sistemas de calefacción tradicionales como radiadores o estufas eléctricas, ofreciendo un rendimiento 3 o 4 veces superior.
- Ahorro: gracias a todos los avances tecnológicos los aires acondicionados poseen muchos sistemas para regular la temperatura, esta característica hace que no estén siempre a pleno rendimiento. Esto se traduce en un importante ahorro económico.
- Rapidez de calefacción: es un sistema que calienta rápido la estancia. Su calor se genera rápido y podrás disfrutar de la temperatura ideal en pocos minutos.
- Sin mantenimiento: este sistema de calefacción no necesita ningún mantenimiento más allá de comprobar que todo funciona correctamente. No necesitas recargar ningún tipo de depósito, ni limpiar ceniceros, ni purgar el sistema…
- Buena calidad del aire: el aire no posee partículas dañinas y los filtros impiden que esas partículas entren al ambiente generando un ambiente limpio y confortable.
Tipos de calefacción con aire acondicionado
Existen distintos equipos de aire acondicionado y calefacción, capaces de adaptarse a las distintas necesidades de tu hogar.
- Aire acondicionado de pared:
Es probablemente la opción más común. Este tipo de equipo se instala en una de las paredes de la estancia, siendo una opción fija y de gran eficacia. Su ventaja principal es la capacidad de climatizar habitaciones de tamaño medio o grande de manera eficiente. Además, la mayoría de los modelos actuales vienen con tecnología inverter, lo que te permite regular el consumo energético y ahorrar en la factura eléctrica.
Es una solución pensada para climatizar grandes superficies o varias estancias al mismo tiempo. Este tipo de sistema funciona mediante una red de conductos que distribuye el aire por toda la vivienda, proporcionando un ambiente homogéneo tanto en términos de refrigeración como de calefacción.
- Sistemas multisplit con calefacción:
Este tipo de aire acondicionado permite conectar varias unidades interiores a una única unidad exterior, lo que resulta muy práctico para viviendas con varias estancias. Cada unidad interior puede regularse de manera independiente, lo que te ofrece mayor flexibilidad para ajustar la temperatura en cada habitación.
Es un sistema ideal para los que necesitan climatizar espacios muy amplios, ya que disponen de acceso a potencias elevadas, con un gran sistema de refrigeración y de calefacción, permitiendo climatizar cualquier tipo de espacio con relativa facilidad.
Sistema con características muy similares a los splits, pero que puede ser instalado tanto en el suelo como en el techo, pudiendo integrarse mucho mejor a nivel estético en cualquier lugar.
¿A qué temperatura poner el aire acondicionado en invierno?
Esta es una de las preguntas más recurrentes si nunca has utilizado un aire acondicionado con la función de calor. La temperatura ideal para el invierno es de 21º. Subir de ésta repercutiría en un mayor gasto del consumo energético. Lo aconsejable es mantener la temperatura indicada en aquellas zonas en las que pasemos mucho más tiempo.
Además, durante la noche lo correcto es que esté entre los 15-17ºC. Se recomienda calentar la habitación antes de irse a dormir, lo que permitirá conseguir una estancia muy confortable y también ahorrar en el consumo.
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